Las autoridades marítimas de Grecia han pedido ayuda internacional para liberar a las tripulaciones de dos petroleros que fueron incautados por las fuerzas iraníes la semana pasada.

El Delta Poseidon y el Prudent Warrior fueron incautados por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica del país en el Golfo Pérsico la semana pasada en un movimiento de ojo por ojo.

Imágenes dramáticas que muestran a oficiales armados del IRGC descendiendo a la cubierta de uno de los barcos desde un helicóptero fueron transmitidas el lunes por la televisión estatal iraní.

El ministro de la Marina Mercante griega, Ioannis Plakiotakis, describió el incidente como una amenaza para la seguridad del transporte marítimo y el comercio. “Hacemos un llamado a todas las naciones para que actúen para poner fin a este incidente inaceptable y garantizar que no vuelva a suceder”, dijo el viernes.

El jueves, la Guardia Costera griega y los servicios de monitoreo independientes dijeron que los dos petroleros estaban amarrados en el puerto iraní de Bandar. A bordo iban al menos nueve ciudadanos griegos y un chipriota.

Teherán ha declarado que las tripulaciones gozaban de "buena salud" y no habían sido detenidas.

La medida se produjo pocos días después de que Atenas anunciara que entregaría a Estados Unidos 700.000 barriles de crudo iraní de un petrolero de bandera rusa que incautó en abril.

El buque ruso, que intentó cambiar su bandera a Irán en el último momento, fue incautado debido a las sanciones globales vinculadas a la guerra de Rusia con Ucrania. Las sanciones de EE. UU. y la UE también impiden que los países compren productos petroquímicos iraníes.

Los ministerios de Relaciones Exteriores de Alemania y Francia también condenaron la incautación de los petroleros griegos y pidieron a Teherán que libere los barcos con su tripulación. El gobierno iraní calificó las declaraciones de "sesgadas" e "interferencias inapropiadas".